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Plage de Saint-Trojan-les-Bains
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Vue aérienne du Port des Salines
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Cabanes ostréicoles du Château d'Oléron
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Chenal de la Baudissière et ses cabanes d'artistes
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Vue aérienne de Fort Royer à Saint-Pierre d'Oléron
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Port de la Cotinière au coucher du soleil
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Fort Boyard depuis la plage de Boyardville
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Balade à La Brée les Bains
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Vue aérienne de Saint-Denis d'Oléron

La isla de Oléron

Cuando cruzas el puente, llegas a la isla francesa más grande de la costa atlántica y también la más meridional. Con sus 32 kilómetros de longitud y sus 8 kilómetros de ancho, la llamada isla luminosa es conocida por sus extraordinarias playas de arena fina, su cautivadora naturaleza, así como su rico patrimonio cultural. En el planning de actividades encontrarás excursiones a pie o en bicicleta, paseos por el mar, actividades deportivas, para descubrir la zona o para relajarte.

Las ocho comunas de la isla de Oléron ofrecen numerosas posibilidades de visitas: el bosque estatal del balneario Saint-Trojan-les-Bains, el puerto de las salinas en Le Grand-Village-Plage, la imponente ciudadela fortificada de Le Château-d’Oléron, el área natural protegida Marais aux Oiseaux de Dolus-d’Oléron, las calles peatonales de Saint-Pierre d’Oléron y su puerto pesquero de La Cotinière, los pueblecitos de Saint-Georges-d’Oléron (Chaucre, Domino y Boyardville, entre otros), los callejones llenos de autenticidad de La Brée-les-Bains y, por último, en el extremo norte de la isla, Saint-Denis-d’Oléron, donde se alza el faro Chassiron con sus 46 metros de altura.

Fuera de los caminos convencionales, sucumbirás al encanto de nuestros pueblos. Atrévete a descubrir su arquitectura al doblar la esquina de callejuelas llenas de malvarrosas. Chaucre, Arceau, La Rémigeasse y muchos otros pueblos típicos con casas de pescadores que tienen la fachada encalada y los postigos de color verde o azul.

Oléron es una tierra de luz, pero también es rica en color y contraste. De hecho, es poco habitual encontrar tantas diferencias en un espacio tan reducido. En apenas unos kilómetros, llegarás de un balneario a un barrio donde las ostras son las protagonistas, de un bosque de pinos a un paisaje de marismas o incluso de una playa de arena fina a una playa rocosa. La característica principal de la isla de Oléron seguramente sea su aspecto salvaje. En cuanto nos apartamos de las zonas urbanizadas, la naturaleza está muy presente. El clima casi mediterráneo ha beneficiado el desarrollo de una flora variada que tendrás la suerte de descubrir durante tus paseos.